EL SUR TENDRÁ LA PRIMERA ESCUELA RURAL BILINGÜE
A 100 km de Puerto Madryn. Los chicos aprenderán inglés para atender a los turistas.
En este poblado de 415 habitantes, a 100 kilómetros de Puerto Madryn, la escuela rural N° 87 quiere abrir una ventana al mundo. Los 100 chicos que se educan en sus aulas en los distintos niveles de enseñanza comenzarán a estudiar inglés y el colegio se convertirá en la primera escuela rural bilingüe del país.
Aunque los habitantes con residencia permanente son pocos, Puerto Pirámides recibe cada año unos 200.000 turistas, muchos de ellos extranjeros, que cambian la rutina de este tranquilo pueblo y santuario de la ballena franca austral. “Saber inglés les dará a los chicos no sólo la oportunidad de relacionarse con los visitantes, sino también, y esencialmente, una salida laboral en un lugar que vive del turismo”, explicó a LA NACION la directora de la escuela, Lorena Navarro.
Así, bajo un cielo plomizo, en una jornada de fiesta, hubo un doble corte de cintas sobre la Avenida de las Ballenas, la calle principal: se inauguraron las nuevas aulas y la modalidad bilingüe, con la enseñanza de inglés intensivo y de orientación turística, para todos los chicos, en un acto encabezado por el gobernador Mario das Neves
"Queremos que los chicos atiendan a los turistas, pero no necesariamente con tareas que desarrollen desde una cocina o manejando un tractor. Buscamos que puedan comunicarse y se transformen en los guías del lugar", graficó el intendente de Puerto Pirámides, Alejandro Albiani.
La alumna Sol, de 8 años, se entusiasmó con la idea de reforzar su inglés en la escuela. "Me parece importante porque acá llega un montón de gente. A veces hablo con los turistas porque ya sé algo de inglés. Pero ahora voy a saber más", dijo la pequeña a LA NACION.
Puerto Pirámides es el sitio desde donde parten las embarcaciones para realizar el avistaje de ballenas, de junio a diciembre de cada año. Aquí, todas las casas están a pocos metros de una playa ancha y rodeada de acantilados. La escuela N° 87 comparte el edificio con la N° 916, de nivel polimodal. Allí, los alumnos suman 15.
José María, padre de un chico del polimodal, también aplaudió la iniciativa. "Acá todos vivimos del turismo. Es la principal actividad. Vivimos en un lugar hermoso con pocas oportunidades para los adolescentes. Ahora podrán trabajar en algo relacionado con el lugar", expresó.
La escuela N° 87 tendrá jornada completa (doble escolaridad). Durante la mañana se mantendrán las clases de las materias incorporadas en el plan de estudios y, por la tarde, habrá talleres. Una coordinadora y dos docentes tendrán a su cargo la enseñanza intensiva del inglés.
"Queremos abrir un nuevo mundo para los chicos; que piensen en ser informantes turísticos o encuentren otras alternativas dentro de las posibilidades que este sitio, único en el mundo, les ofrece", dijo la directora Navarro.
Los primeros pasos
En septiembre del año pasado y a partir de un proyecto elaborado por el Ministerio de Educación de Chubut, la escuela rural de Puerto Pirámides dio los primeros pasos para convertirse en bilingüe.
Constanza Quiroga tiene 16 años y, como otros muchos adolescentes del lugar, trabaja durante la temporada de ballenas. Cursa segundo año de polimodal y sabe que sin alguna especialización le resultará difícil conseguir un buen empleo en el futuro.
"Hay chicos que estudiaron en nuestra escuela y hoy manejan las lanchas para hacer los avistajes. Pero hay muchas otras cosas que podríamos hacer si supiéramos inglés y lográramos un intercambio más fluido con los turistas. Ahora se contratan guías turísticos de afuera, cuando ese trabajo podríamos hacerlo nosotros con la capacitación adecuada", reflexionó la alumna.
Para la adolescente, la enseñanza del idioma en la escuela sembrará aquí conocimiento y arraigo. La iniciativa es, ante todo, una oportunidad para conseguir un mejor trabajo y, sobre todo, para quedarse allí, que es lo que muchos quieren, según dijo.
Además de las posibilidades que se abrirán con la enseñanza bilingüe, la escuela recibió otras mejoras.
Ahora tiene un sector que utilizarán los chicos del jardín de infantes, sala de informática, un salón de usos múltiples y baños nuevos.
También se entregaron las cuatro nuevas casas para las maestras que enseñan en la escuela. "Me mudé siete veces en los últimos siete años. Ahora tendré un lugar", graficó Sandra Agüero, una de las docentes.
Fuente: Diario LA NACIÓN
En este poblado de 415 habitantes, a 100 kilómetros de Puerto Madryn, la escuela rural N° 87 quiere abrir una ventana al mundo. Los 100 chicos que se educan en sus aulas en los distintos niveles de enseñanza comenzarán a estudiar inglés y el colegio se convertirá en la primera escuela rural bilingüe del país.
Aunque los habitantes con residencia permanente son pocos, Puerto Pirámides recibe cada año unos 200.000 turistas, muchos de ellos extranjeros, que cambian la rutina de este tranquilo pueblo y santuario de la ballena franca austral. “Saber inglés les dará a los chicos no sólo la oportunidad de relacionarse con los visitantes, sino también, y esencialmente, una salida laboral en un lugar que vive del turismo”, explicó a LA NACION la directora de la escuela, Lorena Navarro.
Así, bajo un cielo plomizo, en una jornada de fiesta, hubo un doble corte de cintas sobre la Avenida de las Ballenas, la calle principal: se inauguraron las nuevas aulas y la modalidad bilingüe, con la enseñanza de inglés intensivo y de orientación turística, para todos los chicos, en un acto encabezado por el gobernador Mario das Neves
"Queremos que los chicos atiendan a los turistas, pero no necesariamente con tareas que desarrollen desde una cocina o manejando un tractor. Buscamos que puedan comunicarse y se transformen en los guías del lugar", graficó el intendente de Puerto Pirámides, Alejandro Albiani.
La alumna Sol, de 8 años, se entusiasmó con la idea de reforzar su inglés en la escuela. "Me parece importante porque acá llega un montón de gente. A veces hablo con los turistas porque ya sé algo de inglés. Pero ahora voy a saber más", dijo la pequeña a LA NACION.
Puerto Pirámides es el sitio desde donde parten las embarcaciones para realizar el avistaje de ballenas, de junio a diciembre de cada año. Aquí, todas las casas están a pocos metros de una playa ancha y rodeada de acantilados. La escuela N° 87 comparte el edificio con la N° 916, de nivel polimodal. Allí, los alumnos suman 15.
José María, padre de un chico del polimodal, también aplaudió la iniciativa. "Acá todos vivimos del turismo. Es la principal actividad. Vivimos en un lugar hermoso con pocas oportunidades para los adolescentes. Ahora podrán trabajar en algo relacionado con el lugar", expresó.
La escuela N° 87 tendrá jornada completa (doble escolaridad). Durante la mañana se mantendrán las clases de las materias incorporadas en el plan de estudios y, por la tarde, habrá talleres. Una coordinadora y dos docentes tendrán a su cargo la enseñanza intensiva del inglés.
"Queremos abrir un nuevo mundo para los chicos; que piensen en ser informantes turísticos o encuentren otras alternativas dentro de las posibilidades que este sitio, único en el mundo, les ofrece", dijo la directora Navarro.
Los primeros pasos
En septiembre del año pasado y a partir de un proyecto elaborado por el Ministerio de Educación de Chubut, la escuela rural de Puerto Pirámides dio los primeros pasos para convertirse en bilingüe.
Constanza Quiroga tiene 16 años y, como otros muchos adolescentes del lugar, trabaja durante la temporada de ballenas. Cursa segundo año de polimodal y sabe que sin alguna especialización le resultará difícil conseguir un buen empleo en el futuro.
"Hay chicos que estudiaron en nuestra escuela y hoy manejan las lanchas para hacer los avistajes. Pero hay muchas otras cosas que podríamos hacer si supiéramos inglés y lográramos un intercambio más fluido con los turistas. Ahora se contratan guías turísticos de afuera, cuando ese trabajo podríamos hacerlo nosotros con la capacitación adecuada", reflexionó la alumna.
Para la adolescente, la enseñanza del idioma en la escuela sembrará aquí conocimiento y arraigo. La iniciativa es, ante todo, una oportunidad para conseguir un mejor trabajo y, sobre todo, para quedarse allí, que es lo que muchos quieren, según dijo.
Además de las posibilidades que se abrirán con la enseñanza bilingüe, la escuela recibió otras mejoras.
Ahora tiene un sector que utilizarán los chicos del jardín de infantes, sala de informática, un salón de usos múltiples y baños nuevos.
También se entregaron las cuatro nuevas casas para las maestras que enseñan en la escuela. "Me mudé siete veces en los últimos siete años. Ahora tendré un lugar", graficó Sandra Agüero, una de las docentes.
Fuente: Diario LA NACIÓN
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